Un rebote. Solo uno. Esa es la diferencia que arroja la estadística comparativa de las dos últimas temporadas ligueras del CB SPAR Gran Canaria. Y ahí, en el juego interior, se han consolidado las esperanzas, convertidas en realidades, del club amarillo de mantener la categoría.

Ahora se abre una nueva etapa en la que el CB SPAR ha incorporado a la internacional canadiense Christina Ann Morra (en la imagen), que proviene de la Universidad de Wake Forest y debe complementar el poderío interior de las veinteañeras Sika Koné, Adji Fall, con la incorporación de la campeona de España Júnior de 2021, Nerea Manchón, y la aportación de Zenaida Pérez, una jugadora de cantera que se trabaja su espacio tras un periodo alejada de las canchas.

Y profundizando en el resumen estadístico, cabe significar que en la campaña 2020-2021, el equipo ya dirigido por José Carlos Ramos conseguía capturar 1.057 balones y en la siguiente, la 21-22, sumaron uno más: 1.058.

También los guarismos desglosados en defensivos son tremendamente parecidos. Y es que en abril de 2021, el botín era de 737, reduciéndose en ocho en la primavera de 2022: 729.

En lo referente a las capturas bajo los aros rivales, de 321 en la liga de 2021 se pasó a 328 en la última.

Por todo ello, en este trabajo de pretemporada del mes de septiembre que comienza de cara al debut en Salamanca el 5 de octubre, una de las asignaturas en la que habrán de aplicarse muy mucho es en la de cerrar el rebote defensivo y potenciar el ofensivo.

En la liga 20-21, la pareja formada por Kai Afi James y Sika Koné fue protagonista con unos números excelentes, debutando ambas en la LF Endesa. La estadounidense, que este año ha vuelto a España para jugar con la camiseta del Clarinos Tenerife, consiguió 307, y la internacional maliense se fue hasta los 349. Un dúo que dejó huella, complementada con la buena producción en rebotes largos de jugadoras como Marta Hermida, Adji Fall o Sparkle Taylor.

Repetía Sika Koné, ahora concentrada con Malí para el Mundial de Australia, en los 19 partidos que pudo jugar antes de lesionarse con una excelente media de casi 11 capturas por encuentro, acumulando 215. Y a su lado debutaba una novata de la Universidad de Oregon, Lydia Giomi, que se convirtió en una de las mejores de la LF Endesa. Sus 256 rebotes la colocaron al frente de esa lista y le ha valido un buen contrato en el Ensino Lugo.

Asimismo, hay que reseñar la producción en el apartado de rebotes de Adji Fall, tomando el relevo de Sika Koné en el tramo final de la liga y aportado 133 capturas.

Ahí queda el dato. Superar los 1.058 rebotes es el primer objetivo para fortalecer la consecución de la permanencia cuanto antes.