Por Aridane Ávila (*)

Separar las competiciones en dos vueltas, da una perspectiva interesante sobre todo a nivel psicológico. Los errores tienen una nueva oportunidad para ser solventados, y el cierre de un ciclo, permite abrir otro prácticamente desde cero.

SPAR Gran Canaria ha empezado la segunda vuelta con más derrotas que victorias (2-3), pero esos triunfos han tenido un valor especial. Especialmente uno de ellos, el logrado ante Embutidos Pajariel Bembibre (89-73). Por ello, el partido de este sábado ante Al-Qázeres cobra una sugerente importancia por su relevancia, muy similar al de Bemibre.

En octubre en Extremadura, la victoria (primera de la temporada) por 66-80 supuso un cambio importante de dinámica, y un nuevo triunfo ante el conjunto cacereño eliminaría posibles empates ante el equipo mencionado.

Los enfrentamientos ante rivales directos en la primera vuelta, tuvieron un sabor agridulce para SPAR Gran Canaria. Las victorias ante Zamora y la mencionada ante Al-Qázeres, son las que han permitido a las amarillas tener un mínimo colchón de oxígeno respecto a los últimos conjuntos.

Pero la pregunta es que hubiese sido de vencer todos los enfrentamientos directos contra rivales por la permanencia. Especialmente el partido ante Casademont Zaragoza y Bembibre, o la derrota ante Campus Promete repetida en la segunda vuelta. Solo con haber sacado 3 de esos encuentros, la situación sería mucho más cómoda con 8 victorias.

Evidentemente, se han logrado otros triunfos contra equipos muy destacados, pero la importancia de los rivales directos, hace que esos triunfos sean dobles. Se logra una victoria, se merma a un rival, y la moral y la motivación crecen exponencialmente.

Al-Qázeres es un reto importante. Y es que a pesar de tener los mismos triunfos (5) que SPAR Gran Canaria, viene de perder los últimos tres encuentros anotando solo 48 puntos de media. Una victoria grancanaria sería un importante paso en el difícil camino de la permanencia. Tal vez, allá por el mes de marzo resulta que se recuerda este partido como un paso decisivo. Que así sea.

Fotografía: Adji Fall, tratando de contener el ataque de Lara González, del IDK Euskotren San Sebastián.

(*) Aridane Ávila fue responsable del Departamento de Comunicación del CB SPAR Gran Canaria.