Un enamorado de la canasta como Pepote Aguilar no merecía menos. Un partido vibrante, con emoción hasta el último segundo, con dos equipos entregados en cuerpo y alma en un partido en el que ganó el deporte y el recuerdo de uno de esos hombres que siempre permanecerán en el recuerdo de aquellos que tuvieron el inmenso privilegio de conocerle

Esta tarde se medían en La Paterna una selección de empleados del SPAR Gran Canaria y de entrenadores del CB Islas Canarias, dirigidos desde el banquillo por Begoña Santana y una selección de periodistas deportivos de Gran Canaria, en un partido que pretendía recuperar los históricos duelos entre los MMCC y los equipos deportivos y dedicar este partido a la memoria del tristemente fallecido Pepe Aguilar, luciendo un crespón negro en sus camisetas en su memoria.

El encuentro comenzaba con un parcial de 17-0 favorable a los locales, que aprovechaban la efectividad de los técnicos amarillos para abrir una brecha que amenazaba con romper el encuentro a las primeras de cambio.

Sin embargo, el equipo de la prensa reaccionaba de la mejor manera endosando un parcial a su rival de 0-12 que les devolvía a la vida al final del primer cuarto.

La prensa se acercaba, pero Begoña Santana movía su tablero de ajedrez para poner en jaque a los hombres de Norberto González que no cejaban en su empeño de recortar la distancia que les separaba de un SPAR que lograba mantener su ventaja en el ecuador del choque (34-27).

Tras un merecido descanso para reponer fuerzas, el equipo de la prensa apretaba el acelerador y afinaba su puntería, poniendo en aprietos a los locales que veían cercenada poco a poco su ventaja, hasta el punto de llegar a los últimos 10 minutos con un 46 iguales en el marcador.

Con todo por decidir en los 10 minutos finales, ambos equipos lo dejaron todo en el campo, en una lucha sin cuartel, en la que cada posesión contaba y que llegaba a los últimos 2” con un punto de ventaja para SPAR y la posesión en manos de la prensa.

La buena defensa de los locales hacía el resto y SPAR Gran Canaria se hacía con el triunfo final por un ajustado 69-68 y las ganas de vivir próximamente una nueva edición de un partido para la memoria de un Pepote, que allá donde esté seguro que disfrutó de lo lindo con el espectáculo.